6º HALLAZGO. (1ª Parte) La dama del abanico, La costurera,
Una mujer joven y los dos dibujos tempranos de muchachas, pienso que son la
misma persona: Juana Pacheco, esposa de Velázquez.
Este es un estudio extenso que acometeremos por partes.
Existen una serie de coincidencias relevantes que me han llevado a sostener
esta tesis. De los tres primeros cuadros -hay prácticamente una unanimidad
general- se piensa que se trata de la misma persona , aunque hay ciertos críticos
que no ven ninguna semejanza con el de La Costurera. ¡Que Dios les conserve el
oído porque el sentido de la vista ya lo han perdido!
CONSIDERACIONES GENERALES.
Es muy extraño que desconozcamos aún, de todo el material
velazqueño, cuál sería la imagen de Juana Pacheco, esposa de Velázquez. Tenemos
retratos de las dos esposas de Rembrandt pintadas por él mismo, de las dos
esposas de Rubens , también pintadas por él y de esposas de otros muchos
pintores y… ¿no sabemos nada de la de Velázquez? Casados nada más y nada menos
que 42 años -Juana murió una semana
después que el Maestro- y… ¿no pintó a
su propia esposa ninguna vez? Es muy extraño, hubiera denotado Velázquez una
falta de corazón tremenda.
La segunda cuestión es que Juana Pacheco es hija de
Francisco Pacheco, el maestro de Velázquez y por lo tanto algo tendría que
parecerse a su padre. Es regla general que los hijos se parezcan a sus padres;
a veces más al padre y a veces más a la madre. Una vez localizado el retrato de
su padre, como vimos en el 5º hallazgo, podemos ver algunas semejanzas con los cuadros
de Juana que nos ocupan.
1) Los ojos son un elemento muy significativo de
una persona. Si observamos los ojos de los cuatro retratos, (el de La costurera
por su posición es más difícil de observar, aunque es el mismo tipo de ojo) podemos concluir que son un poco globosos y
hundidos en las cuencas oculares, el párpado de arriba muy grande en relación
con el de abajo lo que da una sensación de ojos cansados. Las cejas están finamente
dibujadas en los salientes de las órbitas que vienen desde el cráneo. Si
observamos los ojos de Francisco Pacheco son de las mismas características,
pero de hombre.
2) Las narices, si bien presentan diferencias, son
respingonas en los dos y de una longitud análoga, en el padre y la hija.
3) La conformación general de la cabeza es similar
en los dos: una frente muy parecida, la forma de los pómulos y la manera de
construirse la boca. Presentan unos labios muy parecidos y una barbilla similar.
Los tres primeros cuadros que enumero - que ineludiblemente
representan a la misma persona- nos presentan a una mujer que no es de la
nobleza porque si no, tendríamos alguna referencia en algún cuadro de que se
trataba de la condesa o duquesa de tal o cual… Asimismo la indumentaria no parece
de un personaje de la aristocracia. ¿ Quién es pues esta persona que Velázquez
retrata nada más y nada menos que tres veces? Pues los especialistas no lo
saben.
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